lHoy es el día tan esperado para los españoles, ya que es el día en que se anunciarán los resultados de las elecciones; ¿Pero qué podemos esperar de estas elecciones desde el punto de vista de la economía?
Se sabe, la economía es un campo delicado que interesa mucho a los ciudadanos; de hecho, los principales candidatos presidenciales insistieron mucho en el factor económico: la pensión, el salario mínimo, los impuestos, el precio de el alquiler, la factura de la luz son solo algunos de los temas principales de las diversas manifestaciones celebradas por los exponentes políticos durante la campaña electoral.
PSOE y Unidas Podemos hacen referencia al salario mínimo en su programa (el 60% del salario medio en España y 1200 euros, respectivamente), algo que no referencian PP, Ciudadanos ni Vox, que se han concentrado más en el discurso sobre el alquiler.
En cualquier caso, la incertidumbre reina suprema, como es normal que sea cuando está a punto de «cambiar de aire»; son sobre todo los empresarios los que piden garantías al nuevo gobierno para hacer de la economía en España una economía sólida que pueda relanzarse internacionalmente.
Una situación que por el momento no es muy optimista, ya que estamos presenciando una desaceleración en la esfera económica, tanto en lo que respecta al colapso de la producción industrial como a la desaceleración en la contratación entre empresarios; ciertamente no es la situación como aquella de la crisis de 2008, pero ciertamente hay poco para sonreír.
¿Pero cuáles son los programas económicos de los distintos partidos en detalle? Respecto al partido Ciudadanos, el no tiene muchas ofertas para relanzar el crecimiento de la economía, pero tiene una idea de una reducción de impuestos para evitar un peligroso déficit económico. PP y Vox están casi en la misma situación, solo que no tienen un plan B disponible en caso de que su intención no haya tenido éxito. En su lugar, PSOE y Podemos, se centran fuertemente en un programa de reconstrucción, basado en la imposición de gastos que inevitablemente implica un aumento de impuestos hasta un total de €50000.
Por lo tanto, como es evidente, un sentimiento de incertidumbre continúa acaparando a los españoles, porque los partidos en los actuales programas actuales son básicamente diferentes entre sí, sin garantizar la certeza a los ciudadanos, especialmente desde el punto de vista económico; los ciudadanos y los empresarios piden una sola voz, principalmente estabilidad política, mejoras para favorecer una recuperación decisiva de la economía, reformas y un recorte de las deudas actualmente asignadas a España. Mientras tanto, a partir de esta noche ya sabremos una cosa: quién será el próximo presidente a cargo, entre otras cosas, de dar un nuevo impulso a la economía española.
Guglielmo Gatto