Ya sabes, administrar una empresa con una reputación internacional y amplia no es fácil: existen muchos riesgos y siempre hay que tener cuidado de no caer en las trampas de la economía mundial. En este caso Huawei, el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones, es «víctima» de un asunto que ya ha existido en todo el mundo.
De hecho, la acusación contra el gigante chino es grave y llega nada menos que de la CIA, la intelligence estadounidense: la CIA ha dicho que Huawei ha contado con financiación de las instituciones de seguridad del Estado chino. La CIA ya había iniciado una investigación a principios de año, en colaboración con otros países que representan al Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Esta acusación se produce, entre otras cosas, en un momento histórico en el que la relación entre Washington y Pekín se reduce al mínimo, y por lo tanto, este lamentable asunto solo puede contribuir a socavar aún más esta relación.
La acusación «bomba» fue emitida por primera vez por el conocido periódico inglés «The Times«. Segun este periodico, Huawei recibió fondos procedentes del Ejército Popular de Liberación, de la Comisión de Seguridad Nacional China y de la red de inteligencia estatal de ese país. Huawei ha insistido en que es una empresa privada, independiente de cualquier influencia del Gobierno chino y en repetidas ocasiones ha negado que pueda representar un riesgo para la seguridad.
El gigante tecnológico, por su parte, no es nuevo en recibir ciertas acusaciones, y continúa defendiéndose vigorosamente; «No puedo entender que nos acusen si no tienen evidencias técnicas», lamenta Zhou Yue, un ingeniero de Huawei. Huawei, que, entre otras cosas, también es la segunda compañía telefónica más grande del mundo, superada solo por Samsung, recibió recientemente las acusaciones del presidente de los EE. UU. Donald Trump, quien sugirió que su gente no use los equipos y tecnología de Huawei en el desarrollo de redes 5G de próxima generación, asegurando que los productos de la empresa china representan un riesgo para la seguridad.
Como ya hemos dicho, la compañía china continúa defendiéndose, gracias a la estima mundial que se ha ganado a lo largo de los años, pero podemos apostar al hecho de que esta historia no terminará aquí.
Guglielmo Gatto
PRECIO EN CULTURA 